El precio de la tierra en El Salvador se encareció hasta un 30 % en los últimos cuatro años, según 3 Torres Desarrollador Inmobiliario, uno de los grandes competidores de la industria de la construcción.

“La tierra, un país tan pequeño y poca tierra, pues han subido los precios”, afirmó Griselda Galdámez, gerente de administración y contabilidad de 3 Torres, una empresa creada por tres hermanos que ha invertido más de $110 millones en 22 años de fundación.

El incremento oscilaría en 30 % desde 2020, añadió Milton Galdámez, gerente de operaciones de la desarrolladora, quien aseguró que el incremento llegaría a 50 % si se compara frente a los últimos seis años.

El ejecutivo ilustró que una casa en la colonia San Francisco, San Salvador, vale el doble en relación a 2014, cuando 3 Torres entregó la primera torre de apartamentos en esta localidad. Solo en este territorio, la empresa ha construido tres edificios de altura en la última década y tiene tres más en proceso que suman $39 millones de inversión.

El incremento en el precio de la tierra es más agresivo en zonas de plusvalía donde se concentran los proyectos de construcción residencial o comercial, aunque un detonante también es el repunte en la demanda de inmuebles por parte de los salvadoreños en el exterior. “Viene el hermano lejano y dice 'yo puedo pagar'”, añadió el gerente.

En una entrevista cedida en septiembre, Julio Segovia, CEO de Sforma, señaló que hace 20 años era “el abismo” pensar que el metro cuadrado superaría los $2,000. Pero, ahora “no hay nada abajo de $2,200 y $2,300 por metro”, añadió.


Retos

La gerente de 3 Torres también explicó que el sector se enfrenta a escasez de mano de obra, una situación muy similar que vive la agricultura, así como un incremento en el costo de las materias primas.

La “escasez de mano de obra es uno de los grandes problemas que tenemos en el país porque, claro, hace que los proyectos sean un poco más lentos y que suban los precios. Si hay poca oferta de personas obreras, ya sea albañiles, fontaneros, todos estos oficios que están bien demandados, pues lógico aumentan sus precios”, indicó Griselda Galdámez.

La industria de la construcción sostuvo la economía salvadoreña en los últimos dos años, con tasas de crecimiento trimestrales de entre 1.2 % y 24.8 % desde 2022. Sin embargo, el Banco Central de Reserva (BCR) confirmó que en el segundo trimestre de 2024 sufrió una caída de un 14.5 %.

José Velásquez, presidente de la Cámara Salvadoreña de la Construcción (Casalco), insistió que la merma en la actividad se debe a que en 2023 se desarrollaron proyectos públicos coyunturales, como escenarios deportivos o para el concurso de Miss Universo.

Para Velásquez, con el arranque del viaducto en la carretera de Los Chorros se movilizará el sector de la construcción, cuyo efecto se reflejará hasta 2025. Entretanto, la inversión privada no se ha frenado con una proyección de $700 millones para 2024.