El mandatario salvadoreño dijo que “la gente camina por las calles a cualquier lugar”, y que incluso le sugiere a visitantes extranjeros que si quieren comprobar la seguridad de El Salvador que no lo haga yendo a un lugar concurrido, a un lugar turístico, al contrario “si quiere comprobar la seguridad de El Salvador váyase a lugar más feo, más oscuro, donde no vea nada, váyase a un barranco, váyase con traje, con un reloj más o menos, al lugar más recóndito de El Salvador y se sienta en una silla o en una piedra y espera el amanecer y va a salir el sol y usted va a conservar su reloj, su traje, su celular, su billetera, todo, porque no hay una tan sola esquinita, cantón, caserío, comunidad, barranco, calle, avenida de El Salvador que no sea totalmente seguro, a toda hora del día. Y haber convertido al país más inseguro del mundo en eso, es un milagro, claro, de Dios, pero yo sé que el presidente Chaves es creyente y por ende Dios lo va a ayudar en su plan también”, dijo Bukele.
“¡Amén!”, intervino Chávez.
Bukele recalcó que el problema de la inseguridad ya está resuelto en El Salvador, pero explicó que competir con los incentivos del crimen es imposible para un gobierno, ya que “si se le ofrece una beca a un joven de $300 para que para que se salga del crimen, el delincuente le ofrecerá $3,000 y si el gobierno le va a dar $3,000, el delincuente le va a dar $5,000. No hay forma que un gobierno pueda competir con los incentivos del crimen, por eso el Estado debe intervenir y hacer valer su monopolio sobre la violencia”, dijo el mandatario.
Y en ese sentido aseveró que le corresponde a la fuerza del Estado intervenir para garantizar los derechos humanos y principalmente el derecho a la vida.
Aseguró que cuando el gobierno lanzó su “contraofensiva a las pandillas” estaban un 75% preparados y “las destruimos”, aunque admitió que “al día de hoy todavía quedan pandilleros escondidos y estamos buscándolo y todos los días agarramos uno, dos, cuatro, pero actividad pandilleril en El Salvador no hay, no hay homicidios, no hay extorsión”, aseguró.“Nadie puede ser violento, más que el Estado, solo para intervenir y mantener la paz, nada más. La fuerza del Estado debe de usarse, no para violar derechos humanos, para garantizar los derechos humanos de la gente que nunca se le defienden sus derechos humanos... El Estado debe garantizar el derecho a la vida y para eso debe ir tras los delincuentes”.
Presidente Nayib Bukele.
Bukele aprovechó para cuestionar a “organizaciones de derechos humanos que ahora defienden los derechos humanos de delincuentes” por no haber defendido los derechos humanos de las personas que sufrieron a manos de pandilleros.
“Nosotros hicimos lo que teníamos que hacer y fue impresionante y cayeron, pero fue el apoyo de toda la gente, de todas las instituciones, no había un funcionario con poder en contra de ese plan contra la delincuencia” y aconsejó a Costa Rica, a estar todos en una misma línea.
“Si nos aceptan un consejo en el tema de seguridad, tienen que ponerse todos detrás del plan, o no va a funcionar”, sugirió Bukele al pueblo costarricense.
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