Chelsea selló este sábado su pase a los cuartos de final del Mundial de Clubes tras imponerse 4-1 al Benfica en un dramático encuentro que se definió en la prórroga, luego de que el conjunto portugués se quedara con diez jugadores tras la expulsión de Gianluca Prestianni.

Christopher Nkunku, Pedro Neto y Kiernan Dewsbury-Hall firmaron los tantos decisivos en la segunda parte del tiempo extra para sentenciar la clasificación del equipo dirigido por Enzo Maresca, que ahora se medirá con el Palmeiras.

El Benfica, que logró forzar la prórroga con un penalti transformado por Ángel Di María en tiempo añadido, pagó caro jugar en inferioridad numérica y acabó recibiendo una goleada en un partido marcado por la locura y una interrupción de dos horas por amenaza de tormenta eléctrica.

Antes del parón, Chelsea ya ganaba gracias a un gol de Reece James, pero la suspensión a cinco minutos del final permitió al Benfica reponerse y buscar el empate, que llegó sobre la hora. Sin embargo, la superioridad numérica pesó en la prórroga y el cuadro inglés terminó imponiéndose con contundencia.

Chelsea enfrentará en cuartos al Palmeiras, que previamente eliminó al Botafogo con un tanto de Paulinho en tiempo extra.