El Aston Villa sacó un empate de la visita del Newcastle a Villa Park en un partido marcado por el bajo ritmo, la falta de ocasiones y la expulsión de Ezri Konsa en la segunda parte, que obligó a jugar a los de Unai Emery media hora con uno menos.

Pese a la descompensación por la expulsión de Konsa, el Villa aguantó bastante bien los ataques de un Newcastle huérfano de Alexander Isak. Sin el sueco, los ‘Magpies’ adolecieron la falta de gol y creatividad arriba y no pararon de estrellarse con un muro defensivo que se amplió cuando Konsa fue expulsado en el minuto 66 por derribar a Anthony Gordon cuando este se iba solo contra Bizot, que jugó en sustitución del ‘Dibu’ Martínez.

El argentino cumple sanción por la expulsión de la última jornada de la temporada pasada.

Antes de esa expulsión, el Newcastle había tenido la más clara del partido, en un mano a mano que erró Anthony Elanga al tirarlo al ‘muñeco’, pero después de la salida de Konsa apenas tuvieron ocasiones y el Villa se conformó con un empate que no es del todo malo ya que están a la espera de unos refuerzos que les vuelvan a hacer candidatos a meterse en Europa por cuarto año consecutivo.

De momento, Emery, no contento con lo que ha llegado verano, les ha descartado para estar entre los siete primeros. "No somos candidatos a ello. Haremos un equipo fuerte, pero no tenemos el presupuesto de los grandes", admitió el técnico vasco.

Algo parecido le pasa al Newcastle, que tiene que lidiar con la posible marcha de Isak y encontrar algún fichaje en ataque tras el rechazo de Benjamin Sesko, Bryan Mbeumo, Hugo Ekitiké, Morgan Gibbs-White y Joao Pedro.