El presidente polaco, Karol Nawrocki, pidió este viernes una "reacción enérgica del Ministerio de Asuntos Exteriores" tras la exhibición de una pancarta que calificaba a los polacos de "asesinos desde 1939" por parte de hinchas israelíes en un partido de la Liga Conferencia de fútbol.
La pancarta fue mostrada en el encuentro entre Maccabi Haifa y Raków Częstochowa, que concluyó con victoria del equipo polaco por 2-0 en Debrecen, Hungría, donde se celebró el partido debido a la imposibilidad de hacerlo en Israel.
La embajada israelí en Polonia consideró el comportamiento de los aficionados como "repugnante y sin cabida en un estadio", un comentario que recibió la aprobación del ministro de Asuntos Exteriores, Radosław Sikorski, quien también instó a que "la juventud israelí reconozca que en 1939, Alemania nazi atacó Polonia y comenzó a asesinar a ciudadanos de todas las religiones y nacionalidades".
La pancarta, que decía en inglés "Murderers since 1939", fue una respuesta a una controversia previa en la que los hinchas del Raków mostraron un cartel que afirmaba "Israel mata y el mundo calla".
Tras la divulgación de lo sucedido, se desató una ola de condenas en Polonia. Nawrocki calificó el mensaje como una "estupidez indescriptible" y un "insulto a la memoria de los polacos que fueron víctimas de la Segunda Guerra Mundial, incluidas tres millones de judíos".
El presidente de la Federación Polaca de Fútbol, Cezary Kulesza, exigió acciones a la UEFA, enfatizando que "no se tolerarán provocaciones ni falsificaciones de la historia". Asimismo, ministros polacos como Jakub Rutnicki y Władysław Kosiniak-Kamysz, calificaron el acto de "inaceptable" y "indignante", pidiendo una respuesta contundente de la UEFA.
Otros políticos, como el ex primer ministro Mateusz Morawiecki, exigieron la expulsión del Maccabi Haifa de la UEFA y la prohibición de entrada a Polonia para sus aficionados.