El Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) cerró el año pasado con las "utilidades más altas en su historia" en $268.4 millones, informó este lunes la institución, que califica a 2024 como "el año del fortalecimiento financiero" bajo la administración de la ingeniera costarricense Gisela Sánchez.
Al cierre de 2024, el BCIE alcanzó un saldo de $18,238.7 millones, con un crecimiento de $1,052.5 millones (6.1 %) frente a 2023, mientras que el patrimonio aumentó en $337.4 millones (7.2 %) hasta alcanzar los $5,030 millones.
"Lo anterior en el marco de una gestión coherente de su suficiencia patrimonial en línea con su alta calificación global de AA global y su renovada Estrategia Financiera que aboga por la autosostenibilidad financiera en el largo plazo", indicó.
Según la institución, en 2024 logró el "nivel anual más alto de diversificación geográfica en su historia", al pasar de un "19 % de cartera enfocada en países diferentes a las cinco mayores exposiciones hasta un 24 %".
"Estos resultados financieros históricos son indispensables para la transformación positiva de nuestros países miembros y un contundente mensaje a los mercados e inversionistas que, como resultado, nos han mostrado movimientos positivos en nuestra calificación que no habíamos tenido en los últimos seis años", indicó la presidenta ejecutiva del BCIE.
El BCIE captó más de $2,900 millones, de los cuales $2,592 millones corresponden a 10 emisiones en diferentes monedas y bolsas bursátiles. En 2024 también se emitió el primer bono de salud materna en el mundo, así como la incursión en el mercado de rupias indonesias.
El año pasado también se retomó la "senda de la austeridad" en el uso de los recursos institucionales, que llevó al Índice de Gasto Administrativo a 0.53 %. Esto se logró a través de una "rigurosa técnica y de importantes reformas presupuestarias", que redujeron el gasto del presupuesto en un 6 % en 2024 y un 15 % en 2025.
El balance financiero del BCIE detalla que los préstamos por cobrar superan los $11,772.6 millones en el sector público y privado entre los 11 mercados que apoya de Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, República Dominicana, Belice, Colombia, México, Argentina y Cuba.
De estos, $2,829.3 millones son de El Salvador, de los cuales $2,734.3 millones corresponden al sector público y $85.9 millones al sector privado.