El Salvador tiene la tercera tasa de carga vehicular más grande de Centroamérica, de 255 unidades por cada mil habitantes, destacó el último Informe Estado de la Región.



Esta investigación, realizada desde 1999, presenta una documentación selectiva de estadísticas sobre el desempeño socioeconómico y político de Centroamérica, que incluye también a República Dominicana al ser parte del Sistema de Integración Centroamericana (SICA).

Dicho documento destaca el acelerado crecimiento del parque automotor en la última década como consecuencia de que “cada vez más personas prefieren el transporte privado para satisfacer sus necesidades de movilidad” frente a un deficiente sistema público.



De acuerdo con los registros, Centroamérica y República Dominicana pasaron de tener un parque vehicular de 6.68 millones de unidades en 2015 a más de 18.34 millones en 2022, equivalente a un crecimiento de 11.66 millones en siete años.

Al quitar a República Dominicana, que tiene el mercado automotriz más grande de 5.4 millones, los seis países de Centroamérica acumularon 12.8 millones de automotores en 2022. En este caso, Guatemala queda con el parque más grande, de un poco más de 4.82 millones de unidades.

Crecimiento desproporcionado del parque vehicular

Al medir la tasa de la flota vehicular por habitante, Costa Rica tiene la más alta de la región, de 344 vehículos por cada mil ciudadanos. El informe plantea que el parque aumentó en más de 1.3 millones de automotores (334.4 %) al pasar de 402,591 unidades en 2015 a rebasar los 1.74 millones en 2022.

A pesar de tener el parque vehicular más grande de la región, el informe destaca que tiene la segunda tasa con 271 automotores por cada mil habitantes. En siete años, creció en 2.6 veces pues pasó de 1.8 millones a 4.8 millones entre 2015 y 2022.

Con una sensación de que “ya no cabemos”, El Salvador tiene la tercera tasa de mayor densidad de vehículos por habitantes, de 255 por cada mil ciudadanos. El reporte recopila que en 2015, el parque vehicular era de 677,371 unidades y en 2022 superó los 1.6 millones, con un crecimiento de 136.6 %.

Entretanto, en Honduras la tasa es de 248 vehículos por cada mil habitantes, en Panamá de 214 y en Nicaragua de 173.

Panamá tiene la flota vehicular más pequeña de la región, de 941,487 unidades en registro a 2022 (493 % de crecimiento). En Nicaragua alcanzó los 1.16 millones de unidades (125 %) y en Honduras de 2.5 millones (100 %).

El informe insiste en que el parque vehicular creció de manera desordenada en las áreas metropolitanas y las principales ciudades por el rezago de los servicios públicos para responder a la nueva configuración territorial.

“Como resultado, las flotas vehiculares han crecido de manera desproporcionada en relación con la extensión territorial y el número de habitantes de los países”, indica.

De acuerdo con el VII Censo de Población, del Banco Central de Reserva (BCR), un 28 % de los hogares salvadoreños tiene automóvil, equivalente a 530,147 de los más de 1.8 millones de familias identificadas en 2024.