La Defensoría del Consumidor emitió esta semana una alerta de consumo por el uso de la secadora de pelo Remington que puede producir descargas eléctricas.

A través de un comunicado, la institución dijo este lunes que la Comisión de Seguridad de Productos de Consumo de Estados Unidos (CPSC, por sus siglas en inglés) ha comunicado el retiro voluntario del producto, parte del catálogo de la compañía Empower Brands.

Las indicaciones estarían ligadas a que existe riesgo de sufrir lesiones graves o muerte por electrocución por los desperfectos en la máquina.

Específicamente, las secadoras carecen de una protección contra inmersión, por lo que, si cae en agua y está encendida, puede provocar daños en las personas que la toquen, según la CPSC.

La Defensoría dijo que las secadoras son del modelo D3130DCDN son moradas con detalles negros y posee tres botones de funciones en los mangos de color negro.

El artículo tiene 21.6 centímetros (cm) de alto y 9.1 cm de ancho, con un peso de 0.7 kilogramos (kg) con la palabra “Remington” escrito en blanco en la parte lateral.

Según la Defensoría, en Estados Unidos se fabricaron 56,300 unidades de marzo de 2024 a junio de 2025.

Aunque en Estados Unidos no hay ningún reporte de incidente, la Defensoría del Consumidor ha requerido información a proveedores locales para verificar inventarios y consumidores.

 

Piscina

Este martes la Defensoría emitió otra alerta de consumo por el uso de una piscina que puede provocar ahogamiento debido a sus dimensiones.

El gobierno salvadoreño dijo que la CPSC y la Agencia de Salud de Canadá confirmaron el retiro voluntario de cinco millones de artículos de 122 centímetros o más altos que pertenecen a Bestway, Intex y Polygroup.

“Estas piscinas utilizan correas de compresión que rodean por fuera los postes de soporte y pueden servir como un punto de apoyo, facilitando que un niño o niña acceda a la piscina incluso si se quita la escalera y se ahogue”, añadió la Defensoría.

En Estados Unidos se plantean al menos nueve niños, de 22 meses a tres años, ahogados tras acceder a las piscinas a través de las agarraderas, mientras que en Canadá no se reportan casos.

De la misma forma, la Defensoría realiza verificación de existencia de los productos y la cantidad de consumidores que pudieron tener acceso.