La Red de Sistemas de Alerta Temprana contra el Hambre (Fews Net) advirtió de un incremento de inseguridad alimentaria aguda en El Salvador entre junio y septiembre de 2025.



El boletín de la institución, publicado el 23 de junio pasado, señala que Guatemala, El Salvador y Honduras sufrirán un recrudecimiento de la situación debido a las "perturbación" climáticas que viven en la actualidad.

"Se prevé que la inseguridad alimentaria aguda en la región de América Latina y el Caribe empeore entre junio y septiembre debido a la escalada de violencia de pandillas en Haití, las perturbaciones climáticas en Guatemala, El Salvador y Honduras, y la persistente crisis económica en Venezuela", indicó la red.



Fews Net, parte de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), destaca que la situación climática ha afectado todos los años los cultivos agrícolas en Centroamérica, principalmente en la zona del corredor seco, en donde los hogares de subsistencia son los principales afectados.

Según el documento, durante la época del año las reservas de comida tienden a bajar, por lo que las familias deben comprar alimentos utilizando los ingresos que reciben de sus trabajos agrícolas y temporales.

El programa estadounidense plantea que la inflación en 2025 se mantiene similar o por debajo de las tasas reportadas el año pasado, pero que los ingresos de los hogares se vuelven el principal limitante en el acceso a los alimentos en familias que ya sufren "altos niveles de pobreza monetaria".
Impacto de medidasLa seguridad alimentaria también podría ser afectada por una "evolución" de las políticas comerciales y migratorias impulsadas por el gobierno de Donald Trump.

"Dado que Estados Unidos es un socio comercial importante para los países de Centroamérica, la imposición de aranceles del 10% afectaría a sectores clave como la agricultura, los textiles y el café", añadió la red.

Fews Net estima que los mayores estragos sobre la seguridad alimentaria serán percibidos por la región después de septiembre de 2025.

Las políticas impulsadas por Estados Unidos también podrían perjudicar los niveles de remesas que El Salvador recibe.

El análisis de la red señala que de aprobarse el impuesto de 3.5 % sobre las remeras que salen desde Estados Unidos, podría restarle un punto porcentual del PIB a cada país del norte de Centroamérica.

Estados Unidos es el mayor emisor de remesas para los hogares salvadoreños, al acumular más de un 90 % de los envíos, según los informes del Banco Central de Reserva (BCR).

La medida surge en medio de un envío histórico de remesas desde Estados Unidos hacia El Salvador, en donde el promedio mensual sobrepasó los $340 por familia en este 2025.

Este martes, el Senado de Estados Unidos aprobó la versión revisada del impuesto de un 1 % sobre las remesas que podría perjudicar a al menos 984,500 salvadoreños.

La iniciativa será revisada nuevamente por la Cámara de Representantes para su votación final.

Sin considerar el aumento, Fews Net señala que la baja en los flujos migratorios y las deportaciones influirán en el crecimiento de las remesas.