El presidente estadounidense Donald Trump anunció que su Gobierno impondrá un arancel generalizado del 10 % a un grupo de países pequeños con los que Estados Unidos no mantiene un alto volumen comercial, pero que, según afirmó, siguen representando una relación "significativa" para la economía estadounidense.

“Vamos a publicar una carta pronto hablando de muchos países que son mucho más pequeños”, declaró el mandatario tras su participación en una conferencia sobre energía e inteligencia artificial en Pensilvania, al llegar a la base militar de Andrews. Aseguró que el proceso será ágil y que el nuevo arancel podría aplicarse sin necesidad de más advertencias formales.

El anuncio ocurre después de que la tregua comercial de 90 días, concedida el pasado 9 de abril para renegociar gravámenes, fuese extendida por Trump hasta el 1 de agosto, una prórroga que marcó el inicio de una nueva etapa de presión a países que no han eliminado sus barreras arancelarias.

Advertencias a la Unión Europea, México y otros socios comerciales

Aunque el presidente no detalló qué países están incluidos en este nuevo grupo, sí mencionó que algunos, como la Unión Europea y México, han recibido cartas de advertencia sobre la posibilidad de enfrentar aranceles del 30 % si no ceden a abrir sus mercados. En el caso de Brasil, la amenaza es de un gravamen del 50 %, mientras que para Japón y Corea del Sur se contemplan aranceles del 25 %.

“Estoy muy contento con los acuerdos tal como están. Son muy acertados”, expresó el presidente Trump, quien defendió esta nueva ofensiva comercial como una estrategia eficaz para equilibrar el déficit comercial y promover condiciones más justas para los exportadores estadounidenses.

Aranceles entrarán en vigor en agosto

La Casa Blanca ha confirmado que los nuevos aranceles unilaterales entrarán en vigor en agosto, conforme a lo pactado previamente. Trump insistió en que estas medidas responden a múltiples factores económicos, entre ellos el déficit comercial y la falta de reciprocidad por parte de países socios.

“Se trata del porcentaje que sea y lo basamos en muchos factores”, subrayó el presidente. Aseguró que imponer aranceles sin negociaciones prolongadas “es una forma mucho más rápida” de proteger los intereses económicos de Estados Unidos.