Israel y el grupo islamista Hamás estarían próximos a dar el primer paso en un acuerdo de paz propuesto por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que plantea la liberación de todos los rehenes israelíes a cambio de cesar el fuego sobre la Franja de Gaza.

Hamás, que había recibido un plazo hasta el domingo para pronunciarse sobre la hoja de ruta, aceptó el viernes liberar a todos los cautivos israelíes, vivos y muertos. A cambio, exige que Israel detenga los ataques y se concrete un intercambio de prisioneros palestinos.

El presidente Trump pidió de inmediato a Israel que detuviera los bombardeos para garantizar una liberación segura y rápida de los rehenes. “En muchos sentidos esto no tiene precedentes (…) todos estaban unidos en el deseo de que esta guerra terminara por el bien del Oriente Medio y estamos cerca de lograrlo”, expresó en un video.

Israel, que ya había aprobado el plan días antes, confirmó en la madrugada de este sábado que se prepara para implementar “la primera fase” del acuerdo. Aunque el comunicado de Benjamín Netanyahu no aludió al fin de las ofensivas, medios como Times of Israel y Kan informaron que el Gobierno ordenó reducir las operaciones militares y limitarse a labores defensivas.

Desde la comunidad internacional, líderes y gobiernos calificaron el gesto de Hamás como una oportunidad histórica para avanzar hacia la paz.

António Guterres, secretario general de la ONU, expresó estar “alentado” por los avances y reiteró su llamado a un alto el fuego “inmediato y permanente”, junto con la liberación “incondicional” de los rehenes y acceso humanitario sin restricciones.

Catar y Egipto, que actúan como mediadores, respaldaron la respuesta de Hamás, alabando el liderazgo de Trump. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, la describió como un “avance significativo”, mientras que Emmanuel Macron destacó que la paz está al alcance.

El primer ministro británico, Keir Starmer, se sumó al respaldo y pidió a ambas partes implementar el acuerdo sin demoras. Por su parte, el canciller alemán, Friedrich Merz, y la mandataria italiana, Giorgia Meloni, también coincidieron en que el alto el fuego debe ser prioritario.

Incluso el presidente de Colombia, Gustavo Petro, reconoció estar “de acuerdo esta vez” con Trump y aseguró que, si EE.UU. mueve su Ejército para frenar la opresión en Palestina, Colombia lo acompañaría.

El plan de Washington contempla una desmilitarización progresiva de Gaza, la formación de un gobierno de transición administrado por tecnócratas palestinos y supervisado por Trump y el ex primer ministro británico Tony Blair. Aunque se plantea negociar un posible Estado palestino a futuro, Netanyahu ha rechazado esa opción.