Kilmar u00c1brego García, el migrante salvadoreño cuya deportación errónea desató controversia en la política migratoria del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se declaró inocente este viernes ante un tribunal federal en Tennessee por cargos relacionados con tráfico de personas.
u00c1brego, quien residía legalmente en Maryland desde hace mu00e1s de una década, fue detenido tras un control de tru00e1nsito en Tennessee en 2022, cuando transportaba a nueve personas. La administración Trump lo deportó en marzo de 2025 a El Salvador, pese a una orden judicial de 2019 que lo protegía ante un posible riesgo de persecución por pandillas.
Su defensa calificó las acusaciones como u201cabstrasu201d y advirtió que el caso evidencia graves fallos en el debido proceso. u00c1brego fue retornado a EE.UU. la semana pasada para enfrentar el proceso penal.
Durante la audiencia, se debatió si el acusado debía seguir detenido mientras espera el juicio. Sus abogados denunciaron que fue recluido injustamente en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), y solicitaron su liberación inmediata como acto de justicia bu00e1sica y dijeron que si sigue detenido un sería un acto contrario al debido proceso..
Aunque la fiscalía asegura que u00c1brego García transportó migrantes desde Houston a distintos puntos del país, su defensa sostiene que no existen pruebas suficientes y que se trata de un u201ctrabajador de la construcción acusado injustamenteu201d.
La decisión final sobre su libertad quedó en manos del juez federal, mientras los movimientos de apoyo continúan exigiendo justicia y respeto a los derechos humanos.
u003cimg alt="Manifestaciones de apoyo a Kilmar u00c1brego en las afueras de la audiencia judicial" src="https://static.elmundo.sv/elmundo/uploads/images/2025/06/13/114137.png" style="width: 800px; height: 464px;" /u003e
u003ch2u003eManifestaciones en su apoyou003c/h2u003e
u00c1brego ingresó a la sala del tribunal a las 9:55 a.m., vestido con un uniforme color naranja. Al momento de su declaración de inocencia, mu00e1s de 100 personas protestaban frente al edificio judicial exigiendo justicia.
Su esposa, Jennifer Vu00e1squez Sura, leyó un mensaje en el que él instaba a mantener la fe y a seguir luchando: u201cEstos tiempos oscuros son pruebas de Dios, pero la luz llegaru00e1 y podremos reencontrarnos con nuestras familiasu201d.
En el interior del juzgado, su00f3lo se permitió el ingreso de 44 personas debido al límite de espacio. Mientras tanto, fuera del recinto, decenas de carteles pedían respeto al debido proceso y denunciaban la separación de familias migrantes.
Entre los manifestantes, se encontraban miembros del Consejo Metropolitano de Nashville, representantes de organizaciones pro inmigrantes y ciudadanos que denunciaron recientes redadas de ICE en vecindarios latinos del estado.
u003ch2u003eu003cimg alt="La esposa de Kilmar u00c1brego dijo que hasta el jueves lo pudo visitar en una cárcel de Tennessee." src="https://static.elmundo.sv/elmundo/uploads/images/2025/06/13/114138.png" style="width: 800px; height: 460px;" /u003e
Las acusacionesu003c/h2u003e
El gobierno estadounidense también lo vincula sin cargos formales con tráfico de armas, drogas y abuso contra mujeres transportadas, ademu00e1s de haber participado en un homicidio en El Salvador, acusaciones que no figuran en el proceso judicial. La jueza advirtió a la fiscalía que no puede basar la detención únicamente en señalamientos.
La Fiscalía asegura que u00c1brego transportó personas durante casi una década, aunque no se le ha imputado ninguna condena previa. Su defensa subrayó que la pena promedio por tráfico humano en 2024 fue de 15 meses.
Ademu00e1s, sus abogados continúan una demanda en Maryland contra la administración Trump por desacato, exigiendo sanciones por ignorar una orden judicial que obligaba su repatriación desde El Salvador.
Un video divulgado de su detención en Tennessee muestra una interacción pacífica con la policía, sin indicios claros de delito. Pese a que no fue arrestado en el momento, un oficial comentó que u201cestaba transportando personas por dinerou201d y que llevaba $1,400 en efectivo.
El proceso judicial sigue en desarrollo, mientras la defensa insiste en que u00c1brego es un trabajador de la construcción, no un cabecilla de una red criminal.
El caso también provocó la renuncia de Ben Schrader, jefe de la división criminal de la Fiscalía en el Distrito Medio de Tennessee, quien dejó su cargo el mismo día de la acusación y publicó que su único compromiso era u201cmake it right, in the right way and for the right reasonsu201d.
