Los ataques aéreos entre Irán e Israel continuaron este martes sin pausa, en la quinta jornada de enfrentamientos desde que el Ejército israelí lanzó una operación de gran escala contra territorio iraní, desoyendo los insistentes llamados de la comunidad internacional a un cese al fuego.



En la tarde, Irán activó sus alarmas antiaéreas en el sur de Israel tras un nuevo ataque, el décimo desde el viernes, sin que se reportaran víctimas en esta ocasión. Las autoridades israelíes confirmaron hasta el momento 24 muertos desde el inicio de la escalada bélica.

En Irán, los bombardeos volvieron a estremecer la capital durante la madrugada y se intensificaron por la tarde con media hora de fuego ininterrumpido. El saldo mortal continúa elevándose: tres nuevas víctimas fueron confirmadas, lo que llevaría la cifra total por encima de 230, aunque las autoridades insisten en mantener el número oficial en 224 desde el domingo.



Según datos del Gobierno iraní, los ataques han dejado cerca de 1,800 heridos, incluyendo al menos 35 mujeres y 10 niños. Además, se reportó la muerte de Ali Shadmani, jefe de operaciones del estado mayor iraní, en un bombardeo israelí sobre Teherán.

Irán afirmó haber alcanzado instalaciones del Mosad y sedes de inteligencia militar en Tel Aviv, mientras que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reveló que conoce el paradero del líder supremo Ali Jameneí, pero descartó "por ahora" ordenar su asesinato. "Es un blanco fácil, pero está a salvo... al menos por ahora", publicó en Truth Social.

Ante la creciente tensión, múltiples gobiernos y organismos internacionales reiteraron su llamado a detener las hostilidades. La Unión Europea insistió en resolver las diferencias por la vía diplomática y anunció que coordinará evacuaciones de ciudadanos europeos atrapados en la región.

Rusia, Egipto y Catar también sumaron sus voces a favor de la paz. El Gobierno chino, por su parte, urgió a tomar medidas inmediatas para evitar una mayor propagación del conflicto y pidió a países con "influencia especial sobre Israel" que actúen con responsabilidad, en alusión directa a Estados Unidos.

El Gobierno iraní criticó al G7 por, según sus palabras, ignorar la "agresión flagrante" de Israel y exigió al Consejo de Seguridad de la ONU actuar con urgencia. Además, condenó a la jefa de la diplomacia europea, Kaja Kallas, por "defender al agresor" y no condenar las acciones israelíes.

El conflicto ha provocado la evacuación de 2,725 israelíes cuyas viviendas fueron afectadas por los misiles iraníes, según datos de la oficina del primer ministro Benjamín Netanyahu. Las autoridades también informaron que alrededor de 38,000 turistas extranjeros permanecen en Israel y han habilitado pasos fronterizos hacia Egipto y Jordania para su salida.

En paralelo, unos 100,000 israelíes están varados en el extranjero y comenzarán a ser repatriados mediante vuelos de emergencia.

En Irán, la situación es igualmente crítica. Azerbaiyán informó que ha recibido solicitudes de 51 países para evacuar a 1,200 ciudadanos extranjeros a través de su frontera terrestre. Más de 600 personas de 17 nacionalidades ya lograron salir por esta vía en los últimos días.

La guerra entre Irán e Israel sigue extendiéndose, mientras el mundo clama por una desescalada que aún no parece cercana.