El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, aseguró el lunes que su país ha destruido la mitad de los drones que poseía Irán, así como una gran cantidad de lanzaderas de misiles, en el marco de su más reciente ofensiva militar contra instalaciones estratégicas del régimen iraní.



“Los iraníes tenían miles de drones y hemos destruido la mitad”, afirmó Netanyahu en una conferencia de prensa pregrabada. “Hemos destruido una enorme cantidad de lanzaderas. No importa cuántos misiles tengan, lo importante son las lanzaderas”, añadió.

El mandatario detalló que el Ejército israelí también ha eliminado “cientos de misiles balísticos” y atacado fábricas de armamento “una tras otra”.



Además, reveló que “hasta ahora hemos matado a diez científicos nucleares”, y advirtió que seguirán con operaciones selectivas contra los pocos que quedan.

Uno de los golpes más significativos fue contra el centro de enriquecimiento de uranio de Natanz. “Hemos destruido las fábricas de centrifugadoras. Vamos a seguir destruyendo sistemáticamente los objetivos nucleares”, aseguró, precisando que Natanz “ha sido golpeada muy duramente”.

Netanyahu también señaló que Israel ha atacado las defensas antiaéreas de Irán, lo cual, dijo, ha abierto una “autopista hacia Teherán”. “Israel controla los cielos de Teherán”, afirmó.

En su declaración, también respondió a la reciente disposición de Irán de buscar el fin de las hostilidades. “No me sorprende que quieran parar la guerra, los estamos golpeando con decisión. Vamos con toda la potencia”, sostuvo.

Respecto al papel de otros países, Netanyahu mencionó que ha mantenido comunicación con los líderes de Francia y Reino Unido, destacando su “buena voluntad”, mientras que sobre Estados Unidos indicó que su apoyo se ha centrado en la **intercepción de amenazas mediante misiles defensivos**.

Al referirse a la cúpula iraní, calificó al régimen del ayatolá Alí Jamenei como “un cáncer”. “Son la mayor amenaza para el mundo entero. Llevo 40 años advirtiendo sobre ello”, sentenció.

En relación con el ataque contra la radiotelevisión pública iraní, IRIB, Netanyahu justificó la acción señalando que no se trata de un medio de comunicación, sino de “una herramienta del régimen que oculta la verdad a los ciudadanos”.

Finalmente, afirmó que el liderazgo iraní teme más a su propio pueblo que a Israel. “Nos tienen miedo, pero ¿saben a lo que tienen más miedo? Al pueblo. En cuanto vean que no son lo que creían, se abrirá la brecha que tanto teme el régimen”, concluyó.