El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se comunicó este lunes con su homólogo catarí, Mohamed bin Abdulrahmán, para disculparse por el ataque a Doha sucedido el 9 de septiembre, que resultó en la muerte de seis personas, según informó la cadena catarí Al Jazeera.
Esta llamada se produce en un contexto en el que Trump, tras reunirse con Netanyahu, expresó su "mucha confianza" en que se logrará un acuerdo para poner fin a la guerra en Gaza. Catar, que media junto con Egipto y Estados Unidos para establecer una tregua en el enclave palestino, fue el escenario del ataque israelí dirigido a la delegación negociadora del grupo palestino Hamás, que dejó a cinco miembros del movimiento y un agente de seguridad catarí muertos.
Catar calificó el ataque de "agresión" y "terrorismo de Estado", comprometiéndose a tomar "las medidas necesarias" para proteger su seguridad nacional. En la reunión de la Casa Blanca, ambos líderes discutieron un plan de EE.UU. que incluiría un alto el fuego permanente en Gaza, la liberación de rehenes de Hamás, la excarcelación de prisioneros palestinos en Israel y el retiro del Ejército israelí de la Franja.
Hamás mencionó el domingo que aún no había recibido nuevas propuestas de los mediadores, pero estaba dispuesto a considerar cualquier propuesta "de manera positiva y responsable".
Tanto Israel como Estados Unidos coinciden en que Hamás no debe jugar un papel en la administración de Gaza, proponiendo en su lugar una autoridad provisional dirigida por figuras internacionales, entre ellas el ex primer ministro británico Tony Blair. Además, Trump ha asegurado a los líderes árabes que no permitirá la anexión israelí de Cisjordania.