El representante de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en los territorios palestinos ocupados, Rik Peeperkorn, afirmó este jueves que más de un millón de personas en Gaza necesitan apoyo urgente en salud mental y psicosocial. La cifra, explicó, se ha más que duplicado desde el inicio de la actual ofensiva israelí en octubre de 2023.
“Creemos que el número de personas en Gaza que necesitan apoyo urgente en materia de salud mental y psicosocial se ha más que duplicado”, señaló en una conferencia de prensa en la sede de la ONU en Nueva York, donde participó de manera virtual.
El funcionario advirtió que las lesiones provocadas por el conflicto tienen “profundas consecuencias” emocionales y que los sobrevivientes enfrentan “trauma y pérdida” a diario.
Peeperkorn destacó que los servicios psicosociales siguen siendo escasos en el enclave y pidió invertir en un sistema sanitario más sólido a largo plazo, con atención inclusiva para personas con discapacidad. También alertó que la suspensión de proveedores en el norte de Gaza y las amenazas de nuevas incursiones agravan la situación.
La OMS instó a integrar la atención psicosocial con los programas de rehabilitación, al tiempo que reclamó acceso inmediato a combustible, suministros médicos y productos esenciales.
Según un informe presentado por su director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus, la guerra en Gaza ha dejado 167,000 heridos, de los cuales 42,000 sufrieron lesiones permanentes o que requieren largas rehabilitaciones, incluidas 5,000 amputaciones.
Aunque la OMS no detalló el número de niños afectados, cifras de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) estiman que al menos 4,000 menores han sufrido amputaciones. La organización reiteró que garantizar el acceso a salud física y mental es una prioridad urgente para los palestinos.