El músico cubano Eliexer Márquez, más conocido como "El Funky", es un ganador de dos Latin Grammy, perseguido político en Cuba por sus canciones de protesta contra el régimen autoritario y exiliado en Estados Unidos desde hace tres años y medio. Sin embargo, ahora enfrenta una orden de deportación, tal y como lo informó él mismo este jueves, con tres líneas publicadas en su muro de Facebook.
“Tengo 30 días para abandonar el país o seré deportado”, escribió el rapero, al tiempo que pedía apoyo “a todos los hermanos cubanos que conocen mi trayectoria anticomunista y a los congresistas de este país”.
Tal y como explicó al medio 14ymedio vía telefónica, EE.UU. le denegó la residencia por la condena de un año y tres meses de cárcel que cumplió en Cuba por tenencia de marihuana hace más de ocho años.

El artista aseguró que no ocultó nunca esos antecedentes ante las autoridades estadounidenses, sobre los que pidieron más detalles mientras tramitaba su residencia permanente, acogiéndose a la Ley de Ajuste Cubano. Esto, reconoce, fue un error: “Yo tenía que haber pedido asilo político desde que llegué, pero confié en el abogado que me habían puesto... Siempre le dije: hermano, mi caso es de asilo político, pero él se empeñó en la Ley de Ajuste”.
La decisión del abogado no carecía de lógica, pues esa norma ha sido para los cubanos, desde que se aprobó en 1996, la manera más rápida de obtener la residencia permanente en Estados Unidos, frente a los varios años que puede demorar la concesión de refugio.
Además, esta medida le permite regresar a Cuba, pero viajar a la isla no es opción para El Funky. “Sería un suicidio regresar, mi vida no vale nada en Cuba, eso lo sabe todo el mundo que conoce mi trayectoria”.
El músico llegó a Estados Unidos en noviembre de 2021, precisamente con una invitación especial a la ceremonia de los Latin Grammy, en la que "Patria y Vida" se coronó como Mejor Canción del Año y Mejor Canción Urbana, en una colaboración con Yotuel , Gente de Zona, Decemer Bueno y Maykel Osorbo.
Lee también: "Antonio, la leyenda de la danza española, despunta ahora en un documental".
El Funky enfatiza: “Mi salida fue prácticamente un destierro, esa gente me llevó a mí hasta el aeropuerto”. Además, recibió amenazas disfrazadas de buenos deseos: “Buen viaje, pero no vengas por ahora. Tú sabes que nosotros podemos hacerte un contenido que tú puedas cumplir hasta 20 años”, recuerda el artista, en medio de la incertidumbre, aunque confía en que un nuevo abogado pueda solucionar su caso a tiempo.