El XLVI Congreso Nacional de Cardiología reunió a especialistas nacionales e internacionales para actualizar al gremio salvadoreño sobre los avances más recientes en la prevención, diagnóstico y tratamiento de enfermedades cardiovasculares, la principal causa de muerte en el mundo.
Uno de los ponentes principales fue el Dr. Ramón Quesada, cardiólogo intervencionista salvadoreño y director de innovación en cardiología intervencionista y estructural del Baptist Health Miami Cardiac & Vascular Institute, quien destacó la evolución de los tratamientos cardíacos en el país.
Quesada, pionero en procedimientos de cateterismo en El Salvador, recordó que hace más de tres décadas, junto al Baptist Health, impulsó el primer laboratorio de cateterismo en un hospital privado salvadoreño. Desde entonces, dijo, la atención ha mejorado de forma significativa: “Hoy hablamos de la democratización del cuidado médico. Gracias a la comunicación y a los avances tecnológicos, pacientes críticos tienen más opciones y mejor calidad de vida”.
El especialista subrayó que entre los temas abordados en el congreso estuvieron las técnicas de diagnóstico coronario, las intervenciones para tratar obstrucciones totales y los procedimientos estructurales complejos en válvulas cardíacas. Varios de estos tratamientos fueron aprobados recientemente por la FDA en Estados Unidos y ya comienzan a implementarse en la región.
Aunque muchos procedimientos siguen siendo invasivos, tienen menos riesgo que una cirugía a corazón abierto. “En El Salvador ya se realiza reemplazo valvular aórtico en el sistema público, y con el tiempo se ampliará el acceso a otras terapias más novedosas”, señaló Quesada, quien también atiende pacientes de Centroamérica y el Caribe en Miami.
El cardiólogo compartió casos clínicos de pacientes mayores de 90 e incluso 100 años que han recuperado funcionalidad tras intervenciones de este tipo. “La edad ya no es un límite. El objetivo es mejorar la calidad de vida, no solo prolongarla”, afirmó.
El congreso también contó con la participación de los doctores Juan G. López, especialista en diagnóstico e imagen coronaria, y Carlos E. Alfonso, experto en obstrucciones coronarias totales. Los tres conforman el equipo multidisciplinario del Baptist Health que desde hace más de 16 años colabora con la Asociación Salvadoreña de Cardiología para actualizar a los médicos del país.
En un país donde la hipertensión arterial sigue siendo uno de los principales factores de riesgo, el Dr. Quesada recordó la importancia de la prevención primaria y el control temprano. “La hipertensión mata y debe ser tratada cuanto antes”, advirtió.
El especialista concluyó que la actualización continua de los cardiólogos salvadoreños es clave para ampliar el acceso a terapias innovadoras que ya transforman la medicina cardiovascular a nivel mundial.