El Salvador está atravesando una etapa transformadora en su sistema educativo con la implementación del programa y nueva política de educación "Mi Nueva Escuela", que busca modernizar y fortalecer la enseñanza en el país. Sin embargo, lo que realmente está marcando la diferencia es la integración de programas de inteligencia artificial (IA) y robótica en las aulas, un enfoque que promete posicionar al país en un lugar destacado en la educación tecnológica de América Latina.



El programa "Mi Nueva Escuela" surge como una iniciativa para renovar la infraestructura, los métodos de enseñanza y el acceso a herramientas modernas en las instituciones educativas de El Salvador. En un mundo cada vez más digitalizado, este proyecto tiene como objetivo preparar a las nuevas generaciones para las exigencias de un mercado laboral globalizado y tecnológico.

Los programas de IA y robótica: más que herramientas, oportunidades



La inclusión de programas de inteligencia artificial y robótica en las escuelas no solo fomenta el interés por la tecnología, sino que también desarrolla habilidades críticas como el pensamiento lógico, la resolución de problemas y la creatividad. Desde la primera infancia, los estudiantes están aprendiendo conceptos que van desde programación básica hasta cómo los algoritmos pueden transformar industrias completas.

Este enfoque no solo prepara a los estudiantes para trabajos del futuro, sino que también empodera a las niñas y niños en comunidades que eran marginadas y excluidas, ofreciéndoles la oportunidad de romper ciclos de pobreza a través de competencias globales. Además, estas disciplinas estimulan la colaboración y el trabajo en equipo, cualidades esenciales para cualquier campo profesional.

Aunque el avance es prometedor, es de reconocer que el Ministerio de Educación Ciencias y Tecnología (MINEDUCYT) ha desarrollado una labor estratégica y titánica superando dos grandes obstáculos en América Latina, la falta de acceso universal a internet y dispositivos tecnológicos, desde la pandemia pasando por suspensiones de clases presenciales por condiciones del clima u otros factores,la comunidad estudiantil tiene sus computadoras de primera generación, así como los docentes. El entrenamiento adecuado para el personal docente también se ha convertidoen una prioridad, ya que la implementación efectiva de estos programas requiere educadores capacitados en áreas tecnológicas.

Por otro lado, la colaboración con empresas tecnológicas y organizaciones internacionales está avanzando este proceso, facilitando el acceso a recursos y formación. Estas alianzas también podrían garantizar que los programas de IA y robótica evolucionen y se adapten a las necesidades globales y locales.

Durante la semana del 10 al 16 de mayo, equipos del MINEDUCYT y de ARK Educate visitaron diez centros escolares donde estudiantes de primero, cuarto y séptimo grado presentaron 36 proyectos de innovación desarrollados como parte del programa piloto. Entre los trabajos destacaron soluciones tecnológicas en áreas como filtración de agua, agricultura inteligente, salud asistida por IA, traducción gamificada y herramientas para la reforestación. Este plan forma parte de una transformación curricular sin precedentes en el sistema educativo público salvadoreño, centrada en ciencias, tecnología, matemáticas, computación e inglés.

El ministro de Educación, Ciencia y Tecnología ingeniero José Mauricio Pineda, destacó la participación de las comunidades escolares. "Desde el diseño de filtros de agua hasta herramientas impulsadas por IA, los estudiantes están dando pasos audaces para construir un futuro mejor, apoyados por sus maestros, familias y mentores", escribió en la red social X.

"Mi Nueva Escuela", combinado con la implementación de IA y robótica, representa una apuesta audaz y necesaria para transformar la educación en El Salvador. Es un paso hacia un futuro donde las herramientas tecnológicas no sean solo un lujo y exclusividad de ciertos sectores, sino un derecho para todos los estudiantes. Con el compromiso adecuado por parte del gobierno, las instituciones y la sociedad. El Salvador está siendo líder y referente de convertirse en un líder regional en educación tecnológica, inspirando a otros países a seguir su ejemplo.

*Por Ricardo Sosa. Doctor y máster en Criminología

Docente certificado en Educación Superior