La cantidad de jóvenes salvadoreños involucrados en acciones delictivas o sumergidos en el mundo de los vicios es alarmante. El alcoholismo, la drogadicción, el tabaquismo y otras adicciones nocivas han minado la conciencia de nuestra juventud. Muchos, motivados por las circunstancias se han inmiscuido en actividades delincuenciales que los han llevado a la perdición.
Los jóvenes son proclives a ser manipulados, sugestionados y mal guiados por quienes se aprovechan de la inmadurez de una edad en la que se suele ser intrépido, atrevido y aventurero. En la juventud se prioriza la fortaleza física antes que la fortaleza racional, pues se trata en la mayoría de los casos de vivir el presente sin pensar en el futuro.
A los jóvenes hay que comprenderlos y entenderlos. Todos los que tenemos el privilegio de ser adultos, alguna vez fuimos jóvenes vigorosos y cortoplacistas. Como adultos debemos guiarlos por el camino correcto y orientarlos hacia las metas de su futuro.
Aunque muchos jóvenes salvadoreños están involucrados en vicios, acciones delictivas, holgazanería y desidia, también hay muchos que están en lo correcto y se está forjando una mejor vida para ellos y sus descendientes. La juventud salvadoreña ha demostrado que hay talentos que a gritos están clamando por oportunidades y algunos de ellos llenando de orgullo a su familia y a la patria.
Es el caso de Krissia Saraí Portillo Prieto e Ingrid Carolina Argueta dos estudiantes egresadas de la licenciatura en Biología de la Universidad de El Salvador (UES), quienes se ganaron becas para especializarse en Microalgas y Microplásticos, respectivamente. Portillo viajó a la Universidad de Copenhague (Dinamarca) y Argueta a la ciudad de Niteroi, Brasil, donde asistió a programa de estudiantes de alto rendimiento denominado “Fortalecimiento de las capacidades en los medios marinos y costeros mediante técnicas nucleares e isotópicas", donde participó como asistente de investigación.
La joven Portillo también obtuvo una certificación internacional otorgada por la Comisión Oceanográfica Intergubernamental de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (IOC-UNESCO), lo que desde luego se convierte en un triunfo mayúsculo. Ella ha sido entrenada para identificar especies de algas marinas nocivas mediante el microscopio de luz. Estas son las causantes de vedas, de la mortandad de peces y tortugas marinas, y de intoxicación en humanos. La joven Argueta tiene la capacidad de identificar microplásticosnocivos para las especies marina, con el fin de generar mejores condiciones y descontaminación de la vida marina.
Ambas jóvenes, provenientes de familias de bajos recursos económicos, pronto obtendrán su licenciatura y actualmente se desempeñan como pasantes en el Laboratorio de Toxinas Marinas (LABTOX) de la UES, compartiendo sus conocimientos con otros estudiantes. Dios quiera que ya graduadas sean recibidas por el mundo laboral para que desde su trinchera puedan ejercer y ayudar a mejorar las condiciones de vida de la nación.
Portillo y Argueta solo son dos casos sobresalientes. Muchos jóvenes talentosos salvadoreños gozan de becas en el extranjero donde se forman como economistas, médicos, ingenieros, administradores, científicos y muchas especialidades. Algunos en su plena adolescencia han participado en olimpiadas mundiales de física, letras, robótica, química, matemáticas, biología y otras ciencias, habiendo obtenido primeros lugares, tal es el caso de Marvin Steve De la Cruz Escalante, que en 2018 ganó medalla de bronce en las Olimpiadas Iberoamericana de Biología, en Loja, Ecuador y ahora es estudiante de sexto año de doctorado en Medicina en la UES.
La juventud salvadoreña suele destacar también en otros rubros como el deporte, tal es el caso de nuestra patinadora Ivonne Nochez, que en agosto pasado, en Colombia seconsagró como campeona Panamericana en los 100 metros carriles, superando a las favoritas. Por si fuera poco Nochezlogró el campeonato mundial en la prueba de los 100 metros carriles en los World Skate Games 2024, celebrado la semana pasada tras vencer en la final a la francesa HailaBrunet. Estos juegos se celebraron en Montesilvano, Italia, donde nuestra atleta hizo que se escuchara el Himno Nacional y que ondeara alto la bandera de El Salvador.
Estas tres jóvenes vienen a borrar el estigma de los jóvenes salvadoreños en malos pasos. Es posible que nuestra juventud destaque por cosas positivas. Portillo, Argueta y Nochez son tres ejemplos para nuestra juventud. Nos llenan de orgullo y nos demuestran que sobresalir es posible si cada joven orienta sus energías al deseo y el empeño de lograr sus sueños, con disciplina, respeto y ganas. Sin dejar de ser jóvenes. Juventud divino tesoro.