"Creemos que esta acción ante el regulador es la única forma de poner fin al bloqueo que practica Microsoft, permitir que los clientes tengan opciones y crear condiciones de mercado justas para los competidores", declaró Amit Zavery, director general y vicepresidente de la plataforma Google Cloud, en una conferencia de prensa.
"Las condiciones de licencia de software de Microsoft impiden...trasladar las cargas de trabajo actuales desde Azure [la plataforma en la nube de Microsoft] a nubes competidoras", explicó Google en un comunicado.
Las empresas que poseen el sistema operativo Windows Server de Microsoft y que desean ejecutarlo en otra plataforma en la nube, como Google Cloud o AWS (el servicio de Amazon), enfrentan costos exorbitantes, que pueden llegar a un aumento del 400% en los precios, además de "limitaciones en los parches de seguridad", denunció Google, que presentó su queja el martes por la noche.
Bajo el radar de Bruselas
La Comisión Europea, que ya sancionó varias veces a Microsoft por prácticas anticompetitivas, también abrió una investigación en julio de 2023 contra la multinacional, ya que sospecha que abusó de su posición dominante en el software para favorecer el crecimiento de su herramienta de comunicación Teams en detrimento de sus competidores.Este procedimiento obligó a la empresa fundada por Bill Gates a anunciar el año pasado la separación de su aplicación de videoconferencias Teams de sus programas de ofimática como Word, Excel, PowerPoint y Outlook, primero en Europa y luego en todo el mundo.
Sin embargo, estos anuncios no convencieron a Bruselas.
La Comisión consideró en junio que estos cambios eran "insuficientes para responder a sus preocupaciones y que es necesario modificar aún más el comportamiento de Microsoft para restaurar la competencia".
Microsoft prometió continuar el diálogo con Bruselas, y espera evitar una fuerte multa, como la que recibió en 2013, por un monto de 561 millones de euros (cerca de 600 millones de dólares), por imponer su navegador Internet Explorer.
Google, que espera que la respuesta de la Comisión Europea a su demanda sea "rápida", también está regularmente bajo el radar de Bruselas en temas de competencia.
Así, la justicia europea confirmó en septiembre una multa de 2,400 millones de euros (unos 2,700 millones de dólares) impuesta en 2017 al grupo por abuso de posición dominante en el mercado de las búsquedas en línea, aunque pocos días después el Tribunal de la UE anuló una multa de 1,500 millones de euros impuesta a Google por abuso de posición dominante en la publicidad en línea.
En total, el gigante californiano, fundado por Larry Page y Sergey Brin, recibió multas por más de 8,000 millones de euros por diversas infracciones de competencia.